PUMPKIN: ¿Cuál de ellas es?
JULES: Es en la que pone «Mal hijo».
Pumpkin mira en el interior de la bolsa ... y allí está, ejectiva-
mente. Una cartera en la que aparecen grabadas las palabras
«Mal hijo».
JULES: Esa es. Ahora, ábrela y saca el dinero. ¿Cuánto hay?
PUMPKIN: Unos mil quinientos dólares.
JULES: Métetelos en el bolsillo. Son tuyos. Junto con el
resto de las carteras de los demás y lo que había en la caja
registradora, seguro que hace una cantidad aceptable.
Todo un éxito.
VINCENT: Jules, si le entregas mil quinientos dólares a este
pelagatos, voy a tener que matarlos aunque sólo sea por
pricipios.
JULES: Tú no vas a hacer nada, maldita sea. Quédate donde
estás y cierra el pico. Además, no se los doy a él. Estoy
comprando algo con mi dinero. ¿Sabes lo que estoy comprando, Ringo?
PUMPKIN: ¿Qué?
JULES: Tu vida. Te ofrezco ese dinero para no tener que
matarte. ¿Lees la Biblia?
PUMPKIN: No todos los días.
JULES: Hay un pasaje me sé de memoria y que parece
apropiado para esta situación. Es de Ezequiel, veinticinco,
diecisiete, y dice: «El camino del justo se ve asediado por
todas partes por las iniquidades del egoísmo y la tiranía
de los hombres malos. Bendito sea aquel que, en nombre
de la caridad y de la buena voluntad, pastorea a los débi-
les a través del valle de la oscuridad, pues él es el verdadero
protector de su hermano, el que encuentra a los
niños perdidos. Y yo actuaré con terribles venganzas y
furiosos escarmientos contra aquellos que intenten envene-
nar y destruir a Ynis hermanos. Y sabréis que yo soy
Yahveh cuando os aplique mi venganza». Llevo años
repitiéndome todo eso. Y si lo has oído alguna vez, eso
significa tu culo. En realidad, yo nunca me he preguntado
qué significaba. Pensé que se trataba simplemente de
algo frío que podía decirse a cualquier hijo de puta antes
de meterle una bala por el culo. Pero esta mañana resulta
que he visto una cierta mierda que me lo ha hecho
pensar dos veces. Ahora opino que tú podrías haber sido el
hombre malo y yo el hombre justo. Y aquí, el señor 45,
es el pastor que protege mi justo culo en el valle de la
oscuridad. O quizá tú seas el hombre justo y yo el pastor,
y resulta que es el mundo el que está sumido en la
iniquidad y el egoísmo. Eso me gustaría. Pero esa mierda
no es la verdad. La verdad es que tú eres el débil. Y yo
represento la tiranía de los hombres malos. Pero lo intento.
Te aseguro que intento ser el pastor.
jules baja su arma y la deja sobre la mesa.
Pumpkin lo mira. Luego mira el dinero que tiene en la mano.
Después se vuelve a mirar a Yolanda. Ella le devuelve la mirada.
Agarra la bolsa de basura que contiene las carteras y los dos
salen corriendo por la puerta.
jules, que en ningún momento se ha levantado de su asiento,
toma un sorbo de cqfé.
]ULES (hablando consigo mismo): Está frío.
Aparta la taza hacia un lado.
Vincent aparece junto a jules.
VINCENT: Creo que ahora deberíamos marcharnos.
]ULES: Eso es, probablemente, una buena idea.
Los diálogos en las películas de Tarantino son magistrales. Saludos.
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