viernes, 6 de mayo de 2011

El desván de la casa grande - Soledad Puértolas


Siempre andaba husmeando entre los trastos viejos... hasta descubrir uno de esos objetos que son dejados de lado porque están medio rotos o un extraño artefacto que no se sabía bien qué era o qué había podido ser. Roco se lo llevaba a casa y, tras darle mil vueltas, lo arreglaba o lo convertía en otra cosa. El objeto volvía a nacer y, en muchos casos, adquiría una utilidad nueva

1 comentario:

  1. Encontré este blog a través de LilVia y lo encontré muy interesante. Quisiera seguir leyéndolo. Saludos.

    ResponderEliminar