viernes, 27 de junio de 2025

CRUCES - ALEX LANDRAGIN - 2024



MIENTRAS ESCRIBO ESTAS PALABRAS, se me ocurre que nunca he oído un relato tan literalmente increíble como el que voy a contarte, querida niña. Y, a la vez, nada de lo que he escrito ha sido tan cierto. Paradoja, todo es paradoja. Quizá haya acabado de perder el poco entendimiento que me quedara. Verás: de joven contraje la sífilis, sin duda contagiada por Jeanne Duval. Se dice que esta enfermedad conduce a la locura en la vejez, de forma que no es posible distinguir entre lo real y lo irreal. Vivo a la sombra eterna de la locura inminente. Aunque, como verás, esta no es la única forma en la que Jeanne sigue acechándome. De hecho, si te estoy escribiendo es precisamente por causa de Jeanne.


 

viernes, 13 de junio de 2025

DE ASTORGA Y EL POETA - JAVIER DE LA ROSA - 2024


CUMBRE DEL TELENO

Cumbre del Teleno 
soñada y viva, 
canción de cima 
secreta del Poeta, 
llamando a las puertas 
de Castrillo de las Piedras 
del encinar donde el Palomar 
y las Casas del verano 
perdido en los párpados 
de las estrellas.
Camino de la ermita 
románico aire descompuesto
amanecer que parte 
del centro del ánimo 
del pozo ahogado sin espejos.
Muertas fuentes 
destinadas al aljófar 
inerte de las rosas.

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Aquí Javier De la Rosa es el Poeta que reza a el Poeta, adorando a la magia que es y puede ser la poesía y rendidos a su magia los espectadores (lectores) nos sentimos adoradores de la palabra, como un rito del que solo pocos saben como conmovernos. 

 

martes, 26 de noviembre de 2024

SABIDURÍA FRIKI - STEPHEN H. SEGAL - 2014


 «NO LO INTENTES. HAZLO O NO LO HAGAS.

PERO NO LO INTENTES.»

YODA, EL IMPERIO CONTRAATACA



YODA LE OFRECIÓ A LUKE SKYWALKER este consejo en referencia a la liberación de un caza estelar Ala-X hundido en la ciénaga de Dagobah, pero podría haber estado hablando con Thomas Edison cuando las primeras nociones de la luz incandescente germinaron en su mente. También podría estar hablando con Michael Jordan cuando se ataba los cordones antes de su primer partido en la universidad. También podría haber estado hablando contigo antes de que lucharas por ese gran ascenso. Muy a menudo, nuestro miedo de darnos de cabeza con nuestras propias limitaciones hace que nos contentemos con simplemente intentar cumplir nuestros objetivos. De ese modo, la barra queda ajustada por debajo, lo cual quiere decir que, oye, aunque no hayamos tenido éxito, tampoco hemos fracasado. Y aunque hay veces en las que el esfuerzo que invertimos en una tarea puede ser por supuesto su propia recompensa, seamos honestos: hay otras veces en las que el esfuerzo solo nos importa si hemos alcanzado nuestra meta.

Así que no busques las razones por las que algo no puede hacerse.

Simplemente ve y haz que ocurra.


 

sábado, 16 de noviembre de 2024

JITANJÁFORAS - EDUADRO FRAILE - 2020




JITANJÁFORA DE FILIBERTO EL CHOCOLATERO



En enero y febrero

sale el chocolatero

 a vender el chocolate 

que en su fábrica hace.

En marzo y en abril 

lleva su maletín

repleto de tabletas 

a catorce pesetas.

En mayo, junio y julio 

y en agosto y septiembre 

y en octubre y noviembre,

 por los pueblos y aldeas,

 lleva su mercancía

sea de noche o de día.

Y en diciembre hay que hacer más,

 que llega la Navidad.




 

domingo, 1 de septiembre de 2024

Papá, dame la mano que tengo miedo - Leopoldo María Panero - 2007

             


Un hombre mayor grita a mi lado lo viejo que es, pero yo no lo escucho, porque escucho tan sólo el sonido de las lágrimas sobre mi piel, de esas lágrimas de un hombre que ya no llora, seducido o vendido por el papel que tiembla entre sus manos: quizá un billete de autobús o una novela. Edgar Allan Poe fue usado por unos canallas para unas elecciones trucadas, lo mismo que yo para el golpe de estado. Oh susurro de la serpiente sobre el papel, bendita sea mi mano que repta entre los lápices de colores y los muchachos de quince años. «Sólo los gitanos delante, sólo los gitanos detrás, y sólo asoma en el aire un canto de soleá» (Romance anónimo por la muerte de Federico García Lorca). Oh soledad de Góngora sobre el papel, soledad del muslo en llamas, artífice viejo del silencio, mecanismo secreto de la amargura. Oh pobre Roma, lo amargo de toda literatura. Oh tú, ebriedad de Claudio Rodríguez, alias El Muerto: sigue temblando tu cigarrillo entre los labios, mientras apuras los últimos vinos. Oh tu, Leopoldo María Panero, alias La Muerte: de sexo femenino antes que masculino. Yo he muerto más veces que ningún muerto, y he muerto sin llorar, como si me tirara un plátano; y he muerto sin sepulcro, porque no he querido abrigo y sí sensación pura en mi último suspiro. La única embriaguez es el dolor: dolor sin dolor como una sombra vana, como un dolor de muela o caries en la cama. La vida puede ser sólo una leve irritación, escozor del ambiente en que me masturbo llorando por los muertos. Oh tú, Bar de la Calavera, Gólgota del dolor y la dicha, como dijo sin página Gottfried Benn. Oh tú, Heidegger, profesor de la verdad y catedrático, honor sin piedad de la verdad, sol de la sombra y honor de los muertos. Días viejos sobre el papel. Oh tú, escritor, artista del hambre, hambre de la vida y del aire, no te quejes más si no comes, porque lo que tú querías era precisamente escribir. «Soy el sacrosanto Emperador, el nacido. Hija del sol, imperarás conmigo». «Oh suplicio de la dicha, suplicio de haber nacido.» «Cielo crepusculario y amarillo que jamás perdonará.» A mi lado se oye esta noche una canción estúpida: «Apaga la luz, más luz, que ya no puedo vivir con tanta claridad». La vida es sólo esta canción estúpida, que se oye esta noche con sabor a melaza, susurro de un borracho frío, porque el hombre es sólo un borracho sin abrigo, sereno como un muerto y ebrio como si estuviera vivo. Eres hábil como un espectro recorriendo la ciudad, lo sabemos, borracho como un vivo, sereno como un muerto, aquella voz de labios sonrosados que no callan. Ven a matarme, ven, porque sólo soy un espectro. Rosa homosexual, nacida de la nada, como dije yo hace algunos años. Poemas amontonados en torno a la página en blanco, de la página que nada se dice y nada se sabe, hábil como una serpiente recorriendo la ciudad, lo sabemos, evitando el mal olor que la vida despide. Oh tú, vida torpe, exactitud brutal, sólo quiero brujas para esta noche sin compañía. ¿Qué hizo de vosotros el sol?, me preguntaba yo en un poema dedicado a las brujas. El sol ya no me quiere, es inútil ocultarlo, el sol aúlla en vano por la flor, por la piel que es la única que sufre. Todos lo sabemos, dejad ya de mentir: Pere Gimferrer y Carnero se casaron en octubre, a ojos de todo el mundo, y sólo la piel vino a bendecirlos. Sólo quiero para mí esta alegría, este resplandor, este silencio de Rimbaud y este gesto en mitad del silencio. Llegaré a tener la nobleza de no volver a escribir. Pero la mano aún repta silenciosa sobre el papel, sin poder evitarlo, dominada y precisa en sus movimientos de monstruo. Y no hay más monstruos que las moscas, ya se sabe, como dedos sobre el papel sin dirección alguna. «Moscas, moscas sobre el plátano en las calles», dijo algún poeta católico. Alguien católico que en el desastre se llamara Robert Lowell, nombre inscrito en lo más profundo de la ruina. «Era en Varsovia, en lo más hondo del hecho consumado», como también dijera Gombrowicz. ¿Qué quieres de mí?, preguntó un hombre a las moscas que le corroían y chupaban el semen de forma indiscreta. No quiero nada de ti, contestó la Virgen a su espalda, señalando con los ojos a un hueso de pollo en el suelo, como una oración para que nadie existiera. Una oración para que el día dejara de existir, y para que la sangre dejase de brotar en el manicomio, y para que la locura continuase siendo una larga oración al desastre, larga plegaria para que el día no exista, y la lluvia no hierva cuando toca la piel rasurada del poeta, con el ritmo alocado del tambor y el tatuaje. «Moscas, moscas volando sobre el plátano en las calles.» Secreto de la sangre que sangra, secreto atroz del falo del desastre. Pájaros sobrevolando en círculos sobre la ruina, pájaros que alimentan con su pico el desastre. Pájaros a los que enseñaré cuanto he aprendido de mi mala vida en estos años. Como si fueran mis hijos más pequeños o unos discípulos que todo lo quisieran saber de la música roja del circo.

sábado, 3 de agosto de 2024

VIEJAS HISTORIAS DE CASTILLA LA VIEJA - MIGUEL DELIBES - 1982


En todo caso, la ladera del cerro es desnuda e inhóspita y apenas si con las lluvias de primavera se suaviza un tanto su adustez debido a la salvia y el espliego. Por la ladera aquélla, que ignoro por qué la llaman en el pueblo La Lanzadera, se veían descender en el mes de agosto las polladas de perdiz a los rastrojos. Los perdigones andaban tan agudos que se diría que rodaban. Caminaban en fila india, la perdiz grande en cabeza, acechardo cualquier impreviso, mientras los perdigones descendían confiados, trompicando de vez en cuando en algún guijarro, piando torpemente, incipientemente, como gorriones. Luego, al ponerse el sol, regresaban al páramo con los buches llenos, de nuevo en rigurosa fila india, y allí en lo alto, en las tierras de los hermanos Hernando, pernoctaban.


 

lunes, 20 de mayo de 2024

ARBORETUM - BREVE ANTOLOGIA DE ARBOLES CAIDOS - GSUS BONILLA - 2023



FRAXINUS EXCELSIOR


Poco os cuentan de la sombra de los fresnos 

donde los orfebres tallan sus abejas

y las piezas de cerdo escurren su barniz

eternamente joven


Habrá quien pida a gritos un acuífero 

y sus razones tendrá, pero 

los reyes están muertos 

los baldes aún rebosan agua 

y bajo esa sombra desayunan 

mañana, tarde y noche, las terneras


Agrietado miércoles entre ceniza 

las campanas tocan a concejo


este es un octubre aciago 

y las gargantas que no lo pueden todo

dicen tener sed